Tranquil@s chic@s, que ya voy poniéndome al día y ya me queda poco para hablaros de pelis de estreno. Mientras tanto, seguiremos tirando de la sección 'cine caducado'. Hoy es el turno de PHILLIP MORRIS ¡TE QUIERO!
Con pocas películas siento la excitación de, aun habiendo leído sobre ella, visto trailers y otras técnicas propias de un fetichista cinéfilo, sentarme a ver una película sin saber exactamente qué es lo que voy a ver. Y ese era para mí el gran atractivo de PHILLIP MORRIS ¡TE QUIERO!
Codirigida y coguionada por GLENN FICARRA y JOHN RECUA (para este humilde bloguero, dos auténticos desconocidos) y con fotografía del veterano XAVIER PEREZ GROBET, esta cinta consigue pasar por encima de ciertos estereotipos para llegar al espectador fresca y madura, sin abandonar el toque y el ingenio humorístico.
JIM CARREY, a quien yo personalmente venero, supera con esta película una etapa a olvidar con papeles de comedia de domingo por la tarde (sin desmerecer), y consigue dar credibilidad a un tipo que lleva una doble vida en la que cada mitad se sitúa en las antípodas de la otra. Papel tímidamente arriesgado en el que no deja atrás totalmente su histrionismo pero sí consigue dosificarlo de forma moderada.
EWAN McGREGOR demuestra que posee un extenso catálogo de interpretaciones al ser capaz de hacernos olvidar a OBI WAN KENOBI para ponerse en la piel de un hombre homosexual frágil y sensible, sin llegar a caer en el estereotipo. Por cierto, el doblaje de EWAN no le hace ningún favor, al exagerar demasiado un amaneramiento que no lo es tanto en la interpretación.
RODRIGO SANTORO aparece en un papel secundario haciendo lo que mejor sabe hacer. De guapo. (por cierto, ¿sabías que él es el REY JERJES de 300?)
La fotografía no es excesivamente exigente en esta película, aunque bien resuelta a nivel no tanto de luz como con los valores de plano y composición, algunos movimientos de foco y juegos de diafragma, que añaden frescura y ayudan a que una cinta que podría ser convencional desde el punto de vista fotográfico no lo sea tanto.
A nivel narrativo la película tira de varios recursos que añaden nuevamente una nota distinta. La voz en off, los flashbacks, la imagen estática en momentos narrativamente álgidos, convierten la película casi en un juego para el espectador, un disfrute adicional.
La receta sería: coge una batidora y echa un poco de ATRÁPAME SI PUEDES, CADENA PERPETUA y MAN ON THE MOON. Añade unas gotas de limón bien ácido y unas cucharadas de azucar. Batir durante unos segundos. Servir en una copa ancha y elegante. Siéntese en un lugar cómodo, al aire libre si es posible.
Nótese su sabor entre nostálgico, ácido, chispeante y romántico.
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